lunes, 31 de octubre de 2022

Isidro Díaz-Bustamante Blanco (1872-1960). En el 150 Aniversario de su nacimiento

 


            Isidro Díaz-Bustamante Blanco, que en este mes de agosto de 2022 se cumple el 150 Aniversario de su nacimiento, es sin duda alguna una de las personalidades más destacadas en la historiografía económica de Torrelavega. Fue un brillante comerciante, alcalde, diputado provincial, presidente de la cámara de Comercio e Industria y banquero.

            Su padre Isidro Díaz-Bustamante y Terán era, en 1870, un comerciante que regentaba un establecimiento[1] de maderas y hierros situado al final de la calle del Comercio, en La Quebrantada. Uno de sus once hijos, Isidro Díaz-Bustamante Blanco, es una figura central en la historia de la Cámara de Comercio e Industria de Torrelavega. Participa desde los comienzos, y de una manera decidida, en los trabajos que inician los comerciantes con objeto de conseguir una Cámara local, llegando a ser su presidente durante cerca de diez años.



Isidro Diaz-Bustamante Blanco con treinta años

 

            NEGOCIOS

            En los negocios fue una persona con un gran “olfato mercantil”. Continuó y desarrolló el comercio de su padre  dándole otra dimensión. Primero en La Quebrantada y después en la calle del Comercio junto al boulevard Demetrio Herrero, y también en los aledaños de la estación del ferrocarril del Cantábrico, donde tenía el almacén de maderas, hierros, carbones, cementos y un taller mecanizado de maderas. Hombre pragmático y resolutivo, dedicó toda su vida a gestionar con éxito sus negocios y las instituciones en donde  ocupó algún cargo. Ni se casó ni tuvo hijos.


 

Casa de la familia de Isidro Díaz-Bustamante en la calle Julián Ceballos

 

            CASA DE LA BANCA

            Fue, junto a otras personas,  el que inició el sistema bancario en la ciudad, “con “Casa de la Banca”. Estas entidades menores que suplían la falta de entidades bancarias tradicionales, ayudaban en la financiación de comercios y particulares. Tenían “Casa de la Banca” además de Isidro, el ferretero César Campuzano Ruiz y el curtidor francés Alexis Etchart[2].

            Más adelante, regentó una agencia de la entidad financiera Monte de Piedad Alfonso XIII y Caja de Ahorros. Esta sucursal estuvo ubicada al principio en la “Casa de la Banca” que tenía la firma “Isidro Díaz-Bustamante” en la calle José María de Pereda, para pasar posteriormente a su ubicación más conocida, la de la Avenida del Cantábrico. Esta entidad operaba principalmente con el Instituto Nacional de Previsión del que era entidad colaboradora, y atendía a mutualidades de escolares y seguros infantiles, principalmente.

 

            ANTEPASADOS

            Nos tenemos que remontar al siglo XVIII para encontrar a sus antepasados. Por línea materna localizamos a Manuel de Herrera que se casará con  Manuela de la Mier. Su hijo Manuel de Herrera de la Mier contrae matrimonio[3], en 1775, con Joaquina de Estrada Castanedo. Uno de sus hijos, Manuel de Herrera Estrada se casa con Anselma de San Cifrián de la Pedraja. El matrimonio tendrá cinco hijos: Ramón (1812-1885) primer Conde de la Mortera[4]; Cosme segundo Conde de la Mortera; Pedro; Catalina y Maria Herrera Sancibrián[5] (1813-1905) que contraerá matrimonio con Antonio Blanco de la Mier (1823-1890), que son los abuelos maternos de nuestro comerciante. Lo hacen el día 19 de mayo de 1838. De esta unión nacerán siete hijos: Ramón; José; Ramona; Cosme; Margarita; Maria y Josefa Blanco Herrera (1845-1941),  que se casará con Isidro Diaz de Bustamante y Terán (1845-1914), padres de nuestro biografiado[6].


 

Antonio Blanco y  Mier (1823-1905)


            Por línea paterna, su abuelo fue Manuel Díaz de Bustamante y González (1802-1870) natural de Ibio, Mazcuerras. Era hijo, en segundas nupcias, de Antonio Díaz de Bustamante y de Juana Gonzalez, su segunda[7] esposa. Contrae matrimonio con Lorenza de Terán y Vélez (1815-1874) de Villanueva de la Peña. El matrimonio se queda a vivir en el pueblo de donde élla era natural, y es allí donde nacerán sus tres hijos: Manuel, María e Isidro Díaz de Bustamantey Terán, padre de nuestro industrial.

            El comerciante e industrial  Isidro Díaz de Bustamante y Terán (1845-1914) nace[8] en Villanueva de la Peña, termino municipal de Mazcuerras. Pronto viene a vivir a la villa de Torrelavega en donde instala su negocio. El comercio estaba situado en la Quebrantada, creemos que desde unos años antes de 1870, porque en la relación de matriculas de la contribución de 1874 y en las guías de comerciantes de la época, ya aparece reflejado[9]. Esta importante firma, Isidro Diaz-Bustamante, desarrollará su actividad durante más de 100 años entre esta zona y la colindante  de la calle del Comercio.


 

María Herrera Sancibrián (1813-1905)

 

            Contrae matrimonio[10], el día 17 de julio de 1861, con Josefa Blanco Herrera (1845-1941), miembro de una importante familia oriunda de Mortera. Algunos de ellos armadores que vivían en La Habana, Cuba. Tendrá el matrimonio once hijos: José, Isidro, José María,  Ramón, Manuel, Elvira, Josefa, Jesús, María, Antonio y Amalia. Su primer hijo José (1871-1871) nació[11] en Torrelavega, como todos sus hermanos pero fallece a la edad de 6 meses. El segundo será nuestro industrial, Isidro Díaz-Bustamante Blanco (1872- 1960). El tercero, otro varón, José María[12] (1874-1941). Después nacerá[13] Ramón (1877-1919). El quinto hijo, también varón,  le ponen de nombre  Manuel y nacerá en 1877 falleciendo[14] a los 4 meses. Después verá la luz la primera niña Elvira (1878-1952). El séptimo otra niña, Josefa (1881-1882) que fallece[15] a la edad de 8 meses. Después vendrá Jesus (1882- 1887) que fallece[16] cuando contaba 4 años. El noveno hijo será una niña, María (1880-1973) que se casará[17], el 4 de enero de 1904, con Paulino Canales González (1878-1952). Después nacerá[18] en 1885, Antonio, pero muere con un día y siete horas de vida. Y por último, Amalia (1887-1889) que fallece[19] a la edad de 2 años.


 

Isidro Diaz-Bustamante Blanco a los 7 meses con su madre Josefa Blanco Herrera[20]


            Isidro Díaz-Bustamante Blanco (1872-1960) había nacido[21] en la ciudad de los Garcilasos el día 1 de agosto. Durante muchos años, vivió en una casa señorial e inolvidable para esta ciudad, que existía en la calle Julián Ceballos frente donde más adelante se instalaría  la Farmacia de Antonio Fernández-Abascal, en compañía de  su madre Josefa Blanco Herrera y sus hermanos: José, Ramón, Elvira y María. Esta última estaba casada con el magistrado José Antonio Diaz, con el que tuvo  tres hijos a los que apadrinó Isidro. Ramón fue médico y un viajero empedernido. Su hermana Elvira contrajo matrimonio con Paulino Canales. Y José[22] que compartió con su hermano  los negocios que puso en marcha Isidro. Los dos nunca se casaron, permanecieron solteros.

          Cuando a la edad de 69 años fallece Isidro Diaz-Bustamante y Terán, el día 16 de  mayo 1914, en su casa de la calle del comercio, su hijo, Isidro Díaz-Bustamante Blanco, ya era tesorero de la Cámara de Comercio e Industria de Torrelavega.


 

Esquela del padre de Isidro Díaz-Bustamante

 

            CÍRCULO DE RECREO

            Los que le conocieron le describen como una persona comprometida y solidaria. Participó en muchos de los proyectos sociales que se creaban en la ciudad. Colaboró en la gestión de la sociedad Círculo de Recreo en calidad de tesorero en el periodo de 1911 a 1913, llegando a ser su presidente durante 1925 a 1927. Más adelante pasa a ser vocal de la junta directiva[23] en los años de 1929 a 1930.  Cuando José Maria Cabañas ocupó la presidencia de la Cruz Roja nacional, lo nombró socio de número de la institución por su intensa colaboración con esta altruista institución.

 

            CAMARA DE COMERCIO E INDUSTRIA

            Participa desde los comienzos, y de una manera decidida, en el movimiento que inician los comerciantes con objeto de conseguir una Cámara local. Disponía de una posición privilegiada en el entramado empresarial de aquella época. No en vano era un industrial importante y de prestigio.Como veremos más adelante, de una manera más detallada, participa en casi todas las comisiones de trabajo que se van creando, hasta conseguir el nacimiento de la Cámara de Comercio e Industria de Torrelavega. Posteriormente ocupará importantes cargos en la gestión directa de esta institución, hasta llegar a la presidencia en 1922.

            Comienza sus gestiones en esta institución en la primavera de 1912, cuando empiezan las reuniones para estudiar la conveniencia y viabilidad de esta apuesta tan importante. Isidro forma parte de la histórica comisión de comerciantes que se constituye el día en que se celebra una reunión convocada por la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de la provincia de Santander, en los salones del Circulo de Recreo de Torrelavega, para intentar convencerles de los inconvenientes de crear una Cámara local y de las bonanzas de seguir en la provincial. Para que desistan de su idea les  ofrecen una Delegación para Torrelavega, esta vez con voz y con voto, e incluso ayudando en su financiación. No lograron persuadirles y los torrelaveguenses votaron en contra. Es decir a favor de crear una Cámara en Torrelavega y para los de Torrelavega. Conviene resaltar que en esta comisión también estaban personas tan comprometidas y decisivas con el “portuguesismo” como Julián Urbina Alegre,  Fidel Ramón Palacio y César Campuzano Ruiz.

            Esta comisión trabaja duro, y en el mes de agosto consigue enviar a Madrid toda la documentación en donde se solicita “la autorización para crear una Cámara de Comercio para Torrelavega”. Entre todo lo remitido se encontraban los presupuestos de  la nueva institución. Llega el mes de enero de 1913, y a los pocos días de la promulgación de la Real Orden por la que se autoriza la creación de una Cámara de Comercio local, el alcalde Florencio Ceruti Castañeda, nombra una Junta Provisional que se va encargar, fundamentalmente, de los trámites necesarios para conseguir su constitución oficial tres meses después. Catorce miembros la forman, entre los que no podía faltar Isidro Díaz-Bustamante Blanco.

            Una vez remitida la escritura a Madrid y pasados unos días, el catorce de marzo se emite la segunda Real Orden por la cual se autoriza la constitución oficial de la Cámara de Comercio e Industria de Torrelavega. Y manos a la obra. El alcalde, Florencio Ceruti Castañeda, nombra a dos comerciantes para que sean ellos los que busquen a los mejores para  formar parte de la primera Junta Directiva. Estas dos personas no son otras que Julián Urbina Alegre e Isidro Díaz-Bustamante Blanco. Hubo, desde el principio, dos formas de poner en práctica este encargo. Lo que motivó que aparecieran algunos desacuerdos entre estas dos personas. De ideología y pensamiento similar, el primero regentaba la delegación del Banco de Santander y el segundo, como ya hemos dicho, la del Monte de Piedad Alfonso XIII y Caja de Ahorros de Santander. Quizás aquí esté el problema.

 



Autorización para la creación de la Cámara de Comercio de Torrelavega. Comunicación del Ministerio de Comercio de   10 enero 1913

             

            Después de  nueve años de presidente, César Campuzano Ruiz propicia la renovación. Santos Mesones propone para ocupar la presidencia de la Cámara de Comercio de Torrelavega a “Isidro Diaz-Bustamante Blanco que presenta excelentes condiciones para ejercer el cargo”. El nombramiento se efectúa por unanimidad, y “se faculta a la Corporación a que se traslade oficialmente a su domicilio para comunicarle el nombramiento”. Para acompañar al nuevo presidente fueron elegidos nuevas personas, como José Molleda Ugarte, con fábrica de zapatillas, que entra en la vicepresidencia; Manuel Trugeda Cayuso, con tienda de ultramarinos, como contador y como tesorero Valentín Sollet Alonso, con tenería francesa.

Toma posesión el día ocho de enero de 1922. Ocupando la presidencia de la Cámara de Comercio durante casi diez años, desde 1922 a 1931. Va a continuar  la labor del primer presidente, César Campuzano Ruiz, con el que había sido vice-presidente, pero con él la Cámara alcanzó otras alturas. Durante su mandato se construyó la nueva sede de la Cámara ubicada en la Llama. Su inauguración se llevó a cabo el día veintidós de agosto 1929, y coincidiendo con la efemérides se organizó una “Exposición de productos  de la Industria”, que se clausura en septiembre, acudiendo al acto el Ministro de Hacienda del Gobierno de España, Joaquín Calvo Sotelo. Serán muchos los aciertos en el periodo que es presidente. Destacamos de su importante gestión, el acondicionamiento de las carreteras estatales que cruzan la ciudad; la puesta en práctica de la escuela de enseñanza mercantil y de idiomas; las gestiones para conseguir la construcción del edificio de correos y la potenciación y defensa del Comercio local.


 

Isidro Diaz-Bustamante Blanco a los 60 años


 

 

ALCALDE Y DIPUTADO PROVINCIAL

Ocupó la alcaldía de la ciudad durante dos años, coincidiendo con la presidencia de la Cámara, concretamente desde el día 1 de enero de 1926 hasta el día 7 de febrero de 1928. Fue, también, Diputado Provincial por el distrito Torrelavega-Villacarriedo durante una legislatura. Definía a la ciudad como “la mas importante de esta provincia después de la capital con un comercio y una industria en su máximo esplendor”. Pero advertía que un lugar así no debía ofrecer una  imagen tan deplorable. El  tráfico que circulaba “por las carreteras que tanto en dirección de Asturias, viniendo de Bilbao, como la que partiendo de Santander con dirección a Valladolid”  lo hacía con un firme de piedra caliza que con lluvia se convertía en un lodazal, con una atmosfera repleta de polvo. Por ello durante su mandato alquitranó las principales calles.

 

DIMISIÓN

Los problemas oculares que padecía en ambos ojos iban en aumento, e  Isidro Díaz-Bustamante Blanco se desplaza a la capital del Reino en varias ocasiones, para visitar a los mejores especialistas. Eran los últimos días  de 1927 y los primeros del año siguiente, cuando se agudizan los problemas oftalmológicos. Los oculistas, todos, le recomendaban reposo para sus ya delicados ojos. Después de meditarlo mucho, toma la decisión de presentar la “dimisión irrevocable” como Alcalde de Torrelavega. Lo hace el día 2 de febrero de 1928 mediante una carta que envía a la corporación municipal:

 

Es público que hace algunos meses vengo padeciendo una afección a la vista, afección que se ha ido acentuando viendo en la necesidad de consultar el caso con especialista, quien me recomendó el descanso absoluto y consultado con otros especialistas en Madrid , me disponen igualmente, la privación de toda clase de trabajos intelectuales y un reposo absoluto. Ante estas prevenciones me veo en la necesidad de presentar mi dimisión del cargo de Alcalde del Ayuntamiento, toda vez que me será imposible desempeñarle. Siendo mi resolución irrevocable, no dudo que el Ayuntamiento la aceptara de plano. Al despedirme de mis compañeros de Corporación creo un deber y me es grato consignarlo, que nunca olvidaré la consideración que siempre me guardaron y la cooperación que prestaron a mi actuación por lo cual les guardare eterno reconocimiento.

 

 

 

          Su sucesor en la Alcaldía, Carlos Pondal Morales, se refirió a él en su toma de posesión:

 

Sean hoy mis primeras palabras en este acto, interpretando en ello vuestro común sentimiento, para demostrar a nuestro querido compañero Isidro Díaz-Bustamante, dignísimo Alcalde hasta hoy, de esta culta Ciudad, nuestro sincero cariño y adhesión a la vez que el profundo sentimiento por los motivos en que se funda su dimisión con carácter irrevocable. Sentimos señores la ausencia de tan digno Alcalde mas por las causas que lo motivan, y este sentimiento no solo es nuestro, es general en el vecindario, quien con ello se ve privado de un Alcalde tan popular, que siempre sintió y siente gran cariño por esta Ciudad, hombre de gran prestigio, de grandes conocimientos, de acrisolada honradez y cuya actuación administrativa  en el Municipio, no ha podido ser más acreditadísima. Hagamos votos señores para que pronto podamos verle completamente restablecido y siga siendo nuestro compañero de Corporación y propongo que conste en acta nuestro sentimiento por haber dejado la Alcaldía y que el día de su regreso a esta Ciudad, una comisión presidida por esta Alcaldía salga a recibirle a la estación y con un abrazo sellar de este modo nuestra gratitud, cariño y adhesión hacia él[24].   

 

           Desde este mismo año disminuye su actividad, tanto en los negocios como en  su vida pública. Aunque le solicitan reiteradamente que continúe en la presidencia de la Cámara, dos años más tarde, en 1931, presenta la dimisión irrevocable por los mismos motivos citados anteriormente. Le sucede en el cargo su compañero de Junta Directiva, Alfonso Pérez Gallego (1863-1937), platero y relojero con comercio en los portalones de arriba de la Plaza Mayor, que le obsequia con la siguiente disertación:

 

            Ante la reiterada insistencia del Presidente de la Cámara de Comercio Isidro Bustamante (sic), de presentar su dimisión del cargo, obligado por razones de salud, el pleno deliberó un gran rato ante la contrariedad que le produce la separación de Isidro Díaz-Bustamante del cargo de presidente, desde el cual tanto prestigio ha conseguido para la cámara con sus grandes entusiasmos a favor de la misma, y con su generosidad sin límites, circunstancias por las cuales los miembros todos de la Cámara lamentan su decisión por imposición de su voluntad, por aclamación al nombrado presidente honorario, como recuerdo inolvidable del presidente entusiasma y generoso.


 

Isidro Díaz-Bustamante después abandonar todos sus cargos públicos


                                                                                                                                      

        Deja la presidencia ejecutiva pero no perderá, por tanto, su relación con la institución al ser nombrado presidente de honor. El semanario El Impulsor le reconoce sus méritos:

 

          Sentimos que, obligado por motivos de salud, haya dimitido con carácter irrevocable de la presidencia de la Cámara de Comercio Isidro Díaz-Bustamante, hombre de negocios y enamorado de esta Cámara, dentro de la cual se puede decir que era una institución. Lo que ha trabajado por engrandecer esta Cámara de Comercio e Industria de esta ciudad, cuya personalidad es reconocida en toda España, está en la mente de todos, y esta es la razón de que nos abstengamos de consignarlo; pero como hecho mas saliente en el historial de la citada entidad, durante el tiempo en que la ha presidido Isidro Díaz-Bustamante, ahí esta, para orgullo de Torrelavega, el hermoso edificio de su domicilio social, levantado en la Llama, donde actualmente se desenvuelven no solo los servicios de secretaria con amplitud y comodidad, sino esas clases mercantiles y de idiomas, mas una escuela nacional, que por falta de grupo escolar, funciona en dicho edificio, cedido galantemente por la Cámara al Municipio mientras se habilitan nuevos colegios. El cuidar y sostener esta gran Cámara de Comercio, será el mayor homenaje que se puede hacer al señor Díaz-Bustamante, presidente efectivo hasta hace unos días y presidente de honor ahora, por aclamación.

            Por lo tanto, poco a poco y antes de cumplir 60 años, abandona todas sus responsabilidades públicas para centrarse, cuando su salud se lo permite,  exclusivamente en sus empresas.  En 1936, el día dos de febrero, constituye la sociedad anónima denominada “Isidro Diaz-Bustamante, S.A”.  La sociedad quedó formalizada con un capital social de 80.000 pesetas, emitiendo ochocientas acciones de mil pesetas cada una. El objeto mercantil de esta sociedad era: “la compraventa de hierros, aceros, maderas, cementos, yesos y demás materiales de construcción”. Era Isidro el presidente del consejo de administración y su hermano José, secretario del consejo[25].

 

FALLECIMIENTO

            Isidro Díaz-Bustamante Blanco, alcalde, comerciante y presidente de la Cámara de Comercio e Industria de Torrelavega, fallece en la ciudad que le vio nacer, el día 1 de abril de 1960, y está enterrado en el cementerio de Geloria de la Llama en el panteón de la familia Díaz-Bustamante.


 

Panteón de la familia Diaz-Bustamante en el Cementerio de Geloria


 

Tumba de Isidro Diaz-Bustamante



[1] En 1874 aparece en las Matriculas de la Contribución Industrial del Ayuntamiento de Torrelavega.      Archivo Municipal Torrelavega.

[2] Bustamante Gómez, Tomás; El Banco de Torrelavega 1920/1942. Artes Gráficas Quinzaños, 2009, pág. 105.

[3]  Hija de Salvador de San Cifrián y Ramona de la Pedraja, vecinos de Liencres

[4] El primer Conde de la Mortera, Ramón Herrera Sancibrián (1812-1885) había nacido en Mortera el 2 de Marzo.  Siendo muy joven, a la edad de 17 años, emigro a Cuba llegando a Coronel de Batallón de las Milicias de la Plaza de La Habana, en los tiempos de la Guerra Grande (1868 -1878). Fue patrocinador de batallones de voluntarios en la Península para luchar contra los insurrectos cubanos. Se casó con Manuela Marcos. El 16 de Julio de 1871 Amadeo I le otorga por Real Despacho, el título nobiliario de Conde de la Mortera, siendo Regidor del Ayuntamiento de La Habana. Fue lo que denominamos un indiano,  naviero y patriota. Emuló al marqués de Comillas y fue uno de los montañeses cuyo espíritu emprendedor se puso de manifiesto en la isla de Cuba. Participó en múltiples actividades y empresas todas con pleno éxito. Un simple hato de emigrantes, un bagaje envidiable de juventud, ya que apenas contaba 17 años de edad, le bastaron  para lograr amasar una gran fortuna. Como naviero fundó  la línea de “Vapores de Tornillo” que unía los puertos de Santiago de Cuba y Guantánamo y como financiero creó el Banco Español de La Habana. Fallece el 29 de Julio de 1885.

A su muerte el titulo pasó a su hermano Cosme Herrera Sancibrián, segundo Conde de la Mortera. Desde Cuba envió dinero para construir la Iglesia y las escuelas de Mortera  además de levantar la casa de los Condes de la Mortera en la antigua provincia de Santander.

El tercer Conde de la Mortera será Ramón Herrera Gutierrez que contrae matrimonio en 1881 con su prima, hija del segundo Conde de la Mortera, María Juana  Herrera Sosa en La Habana.

[5] Fallece el día 23 de diciembre de 1890 en Mortera. Otorgó testamento ante el notario de Mortera Domingo Cadelo. Registro Civil Piélagos, tomo 16, pág. 156, sección 3ª.

[6] Era hija de Francisco de Estrada del lugar de Puemarejo y de Manuela de Castanedo vecina de Peñacastillo. Estos datos y otros de la familia han sido aportados por su sobrina nieta  María Luisa Diaz de Bustamante y Terminel.

[7]  Su primera mujer fue María Josefa Pérez de Hoyos con la que tuvo dos hijas, María (1825-1908) y Josefa. 

[8] Registro Civil Torrelavega, tomo 53, folio 131, número 131. 

[9] Matriculas de la contribución, Archivo Municipal Torrelavega  y en Antonio María Coll y Puig: Guía Consultor e  Indicador de Santander y su Provincia. Imprenta Evaristo López Herrero, Santander 1875.

[10] Registro Civil de Torrelavega, libro 70, folio 42, número 81.

[11]  Registro Civil Torrelavega, tomo 1, folio 22 y tomo 3, folio 21, número 148.

[12] Registro Civil Torrelavega, tomo 5, folio 64, número 110 y tomo 26, folio 197 del Registro Civil  Santander.

[13]  Registro Civil Torrelavega, tomo 6, folio 149 número 240 y tomo 57, folio 245, número 244.

[14] Registro Civil Torrelavega, tomo 7º, folio 194 y tomo 8, folio 112, número 173.

[15] Registro Civil Torrelavega, tomo 13, folio 51, número 51 y libro 13, folio 9, número 9.

[16] Registro Civil Torrelavega, tomo 11, folio 143.

[17] Registro Civil Torrelavega, tomo 9, folio 34, número 34. 

[18] Registro Civil Torrelavega, tomo 20, folio 134 y tomo 17, folio 183, número 183.

[19] Registro Civil Torrelavega, tomo 23, folio 18 y tomo 23, folio 170.

[20] Muchas de las fotos que aquí aparecen pertenecen a la colección de María Luisa Diaz de Bustamante y Terminel. Para ella mi agradecimiento.

[21] Registro Civil Torrelavega, tomo 4, folio 1.

[22] Manuel Díaz-Bustamante Blanco regentó una fábrica de yeso en Torres y el despacho junto a su hermano Isidro en la calle Julián Ceballos 6 y 8.

[23] José Ortiz Sal: El Círculo de Recreo de Torrelavega. Artes Grafica J. Martínez, S.L. 2011.

[24] Bustamante Gómez, Tomás: El Banco de Torrelavega, 1920/1942, pág. 227 y 228. Graficas Quinzaños, Torrelavega, 2009.

[25] Bustamante Gómez, Tomás; El Banco de Torrelavega, 1920/1942. Artes Gráficas Quinzaños, 2009, pág. 232.