José Obeso Revuelta
(1884-1952) nació en Tanos, Torrelavega, el día 25 de diciembre de 1884. Fue
uno de los dos hijos del matrimonio formado entre Joaquin Obeso que era natural
de Tanos, y de Catalina Rebuelta (sic) que había nacido en el lugar de Vargas. El
otro fue una niña a la que pusieron el nombre de Obdulia. Cuando contaba 26
años, el ganadero de Tanos, Joaquin Obeso Rebuelta se casa, el día 12 de enero
de 1884 en la iglesia de Nuestra Señora de las Nieves, con Catalina Rebuelta y
Velar de 19 años, labradora y natural de Vargas. Los abuelos paternos de José
Obeso Revuelta eran naturales y vecinos del pueblo de Tanos: Antonio Obeso y
María Rebuelta (sic). Y por línea materna naturales y vecinos de Burgos: Jose María
Rebuelta y Agustina Velar. Era costumbre en aquella época que los varones
comenzaran a trabajar muy pronto. Había mucha necesidad. José Obeso empezó con
12 años en la Tejera fabricando ladrillos y tejas. Más adelante trabajó en las
Minas de Obregón, después fue albañil hasta acabar en un oficio que le
reportaría cierta notoriedad, el de cantero. Llegó a capataz de los obreros
municipales del ayuntamiento de Torrelavega y fue Secretario de la Sociedad de
Canteros, creada en 1902. Ocupó este cargo en dos periodos, de 1904 a 1908 y de
1911 a 1917 hasta llegar a ser, este mismo año su presidente. En 1919 es
nuevamente relegido para ocupar el cargo de presidente de los canteros de
Torrelavega. Sus cualidades personales y su gestión le aúpan y es elegido por
sus convecinos como alcalde de barrio y presidente de la junta administrativa
de Tanos desde enero de 1916 hasta 1924. En este año cesa en el cargo al
desaparecer esta entidad administrativa menor al pasar a depender directamente del
ayuntamiento de Torrelavega. Eran los tiempos de Miguel Primo de Rivera. Su gestión
fue fructífera y exitosa para las gentes y el pueblo de Tanos. Como obras más
relevantes destacamos la construcción de las escuelas, primero, de niños en
1917 y tres años después la de niñas. Unificó los lugares de Lobio y Tanos en
uno solo que pasará a denominarse Tanos. Lleva a su pueblo la luz eléctrica y
el alumbrado público entre 1921 y 1923. Se construye la carretera al cementerio
donde se implica de una manera destacada Alfredo Fernández-Vallejo Velarde hijo
del que fuera alcalde de Torrelavega Joaquin Fernandez-Vallejo y Fernández Castanedo
(1842-1883) Y por último durante su mandato se renueva la tubería de agua de
las 3 Fuentes y se instalan cuatro más en la Avenida Fernández-Vallejo. Fue
elegido para desempeñar otros cargos como el de Presidente de los campesinos
del Partido Judicial de Torrelavega entre 1925 y 1934 y Presidente de la
agrupación de empleados municipales entre 1931 y 1934.
José Obeso Revuelta,
cuando contaba 21 años, contrae matrimonio con Leontina García Fernández que
por entonces contaba 19 años y era hija de Ramón García natural del pueblo de
Molledo y de Balbina Fernández nacida en Campuzano. La ceremonia se celebra el
día 18 de febrero de 1905 en la iglesia de Nuestra Señora de las Nieves de
Tanos. Tuvieron 9 hijos: Maria, Piedad, José, Manuel, María (la primera con el
mismo nombre ya había fallecido), Leodora, Leontina, Isidora y Jesús. Hombre comprometido,
de profundas convicciones sociales, continuó desempeñando las funciones de capataz de los obreros en el
Ayuntamiento de Torrelavega hasta la entrada de las tropas franquistas en la
ciudad con motivo de la guerra incivil Española. Entonces fue despedido y más
tarde detenido, siendo acusado de rebelión militar. Ingresa en la cárcel
provincial de Santander el día 2 de septiembre de 1938 formándole un consejo de
guerra con procedimiento sumarísimo, número 23.146. Sin embargo, y tras pasar
varios meses en prisión, fue dictada sentencia, el 19 de diciembre de 1938,
siendo absuelto de todos los cargos con muchos pronunciamientos favorables. José Obeso Revuelta falleció
a los 68 años, el día 19 de abril de 1952. Sus restos reposan en el cementerio
Civil de Geloria en la Llama de Torrelavega, a donde fue llevado a hombros de
cuatro albañiles, tras la negativa del entonces cura de Tanos de darle
cristiana sepultura, como era su deseo.