Eusebio
Ballesteros, 1890. Fotografo Francisco Redón. Colección Gema Ballesteros González
CONFITEROS PIONEROS
Las primeras confiterías de la villa
de Torrelavega se instalaron, como tales, en los años treinta del siglo XIX. No
tenemos constancia de ninguna anterior a esas fechas y sabemos que en el
“Padrón de Vezinos de la Villa de Torrelavega de 1753”, correspondiente al
Catastro del Marqués de la Ensenada, no aparecen ningún confitero ni pastelero.
Tenemos que esperar al primer tercio del siglo siguiente para que aparezcan los
primeros.
El día 22 de noviembre de 1825 se
publicaba en Madrid una Real Instrucción por la que las Provincias podrían
percibir impuestos de los profesionales, comercios e industrias con actividad,
naciendo así una contribución que se cobró por primera vez en 1836. Por este
motivo, las Jurisdicciones tuvieron que ordenar una relación de todos los
profesionales y sus gremios, relación que dio origen a las Matriculas o listas
nominales de los individuos que trabajaban en la Jurisdicción de Torrelavega[1].
Estando así las cosas, el día 22 de
octubre de 1835, “en la villa de Torrelavega y Sala Capitular” se reunieron el
Alcalde, el Licenciado Robustiano de Ceballos[2],
Procurador Síndico General, y los demás procuradores capitulares de los pueblos
de esta Jurisdicción. Allí el Intendente de Rentas de esta Provincia estableció
la formación de la matrícula o lista nominal de los individuos comprendidos en
la contribución del subsidio industrial y de comercio, confeccionándose la
primera relación de comercios e industrias. Es en esta lista donde aparecen por
primera vez los miembros del gremio de confiteros de la villa de Torrelavega, precursores
de los que tanto brillarán en los siguientes siglos y que harán famosa a
Torrelavega por sus hojaldres y dulces. Me estoy refiriendo a Diego Sánchez y
Ramón Gortazar, que regentaban una confitería[3]
cada uno. Son los denominados Confiteros Pioneros, de quienes paso a hablar a
continuación.
Ramón
Aquilino Gortázar Vallés no vino al mundo en Torrelavega, sino en Santander, en
enero[4]
de 1799. Era hijo de Manuel de Gortázar, nacido en el Valle de Arcentales
(Encartaciones de Vizcaya) y de Gertrudis de Vallés, natural de Liendo.
Contrajo matrimonio este maestro confitero en Santander, el día 30 de agosto de
1824, con Justa del Campillo Obregón, nacida[5]
en la villa de Cartes el día 19 de junio de 1801, hija de José del Campillo y
de María de Obregón, naturales, respectivamente, de Santander y de Cartes.
Hasta 1830 Ramón y Justa residieron
en Santander, ciudad en la que vieron la luz sus dos primeras hijas: Camila[6]
y Casimira[7].
Ya viviendo en Torrelavega, el matrimonio tendrá siete descendientes más:
Isabel[8],
Gregorio[9],
Gumersindo[10],
Francisco[11],
Hipólita[12],
Carlos[13]
e Indalecio,[14] el
más pequeño.
El padre de Ramón,
Manuel, era un vasco que había nacido al igual que su abuelo, de Arcentales,
Vizcaya. Fueron los abuelos de Ramón, por línea paterna, Manuel de Gortázar y
Águeda de Garais, naturales de la villa de Munguía (Vizcaya). Los abuelos
maternos, Manuel de Valles y Manuela Martínez, ambos naturales y vecinos del
pueblo cántabro de Liendo, nos proporcionan el nexo de unión con Cantabria.
Ramón Gortázar,
que, además de confitero, fue “Procurador del Juzgado de Primera Instancia de
esta Villa”[15],
falleció[16] en Torrelavega el
día 7 de marzo de 1859, a los 60 años de edad. Su mujer, Justa del Campillo y
Obregón, lo hizo a la edad de 72 años, el día 25 de junio de 1875. Tres meses antes, el día 17 de marzo, (y no el 19, como
consta en el certificado de su defunción), enferma "en la cama y sin pulso",
dictó, ante el notario de Torrelavega Manuel Martínez-Conde, testamento[17] por
el que nombraba herederos de sus
bienes, a partes iguales, a sus tres hijos vivos, Gumersindo, Francisco y
Carlos, así como a su nieta María Gumersinda Marquina, hija de la ya fallecida
Hipólita.
Confiteros de Torrelavega en 1883. Archivo Municipal Torrelavega
Confitería Valentín García Corona. Colección Tomás Bustamante
El mencionado comerciante confitero Ramón
Sagarminaga Añivarro (1817-1893) fue propietario, además, de un establecimiento
de licores en La Llama. A mediados del siglo XIX vivió en el número 4 de la calle Ancha,
para trasladarse en 1870 al número 15 de la Calle Consolación[20].
Nacido en Campuzano el día 7 de septiembre de 1817,[21]
era hijo de Benito Sagarminaga Orbe y de Josepha Añivarro Manzarraga. El padre de nuestro confitero había nacido en
Zeanuri (Vizcaya), el día 13 de abril de 1774,[22]
hijo de Juan Fernando Sagarminaga Echezarraga y de María Bentura Orbe Zuloaga,
vecinos de Zeanuri (Vizcaya). Josepha era natural de Areatza (antiguamente Villara) e hija de Tiburcio Añivarro y
Thomasa Manzarraga. Benito y Josepha se casaron en Zeanuri, el 29 de agosto de
1801[23].
Pronto vinieron a vivir a Campuzano, Torrelavega, donde nacieron sus hijos:
Marcelina[24]
(n.1802); Bernardino[25]
(n.1804); María Eduvigis[26]
(n.1805); Luis[27]
(n.1807); Joaquín[28]
(n.1810); Cirilo[29]
(n.1814); María del Carmen[30]
(n.1816); en 1817 nace nuestro confitero, como ya hemos dicho; María del Carmen
Francisca[31]
(n.1819) y Tiburcio[32]
(n.1821). Diez hijos, todos nacidos en Campuzano.
Establecimiento de Ramón Sagarminaga. Colección Tomás Bustamante
La esposa de
nuestro confitero, Antonia Obregón Pérez, falleció[33] a los
55 años en esta villa de Torrelavega, el día 28 de mayo de 1876, y su marido lo
hizo, víctima de la gripe, a los 76 años de edad, el día 3 de febrero de 1893.
Al día siguiente fue enterrado[34]
en el cementerio de Geloria[35].
En su establecimiento trabajaron dos
empleados que aprendieron el oficio de confitero con Ramón Sagarminaga. Nos
estamos refiriendo a Juan Antonio de Argüeso García del Tánago y al hijo de
este: Antonio de Argüeso Ruiloba. A continuación damos cuenta de ellos.
Juan Antonio de Argüeso García del
Tánago había venido al mundo[36] en
Rudagüera el 8 de abril de 1817. Fue su progenitor Manuel María Ciriaco de
Argüeso y Castañeda, nacido[37] por
casualidad en Arce, el 10 de abril de 1773, pero originario de Arija (Burgos),
donde se le impusieron[38] los
óleos y crismas el 13 de junio de 1775, y fue su madre Manuela García del
Tánago y Santibáñez, nacida[39] en el
barrio de San Pedro de Rudagüera el 15 de septiembre de 1774. Por línea
paterna, Juan Antonio era nieto de Antonio Agustín de Argüeso Díez, natural de
Arija, y de la segunda mujer de este, Ana María de Castañeda y López, natural
de San Vicente de Villamezán (Burgos); por línea materna, lo era de Francisco
García del Tánago García y de Josefa de Santibáñez Iglesia. Casó Juan Antonio[40] el día
19 de septiembre de 1838 con María Rosa Catalina de Ruiloba, hija de José
Antonio de Ruiloba y Ruiloba, natural de Abadames (Asturias), y de María
Antonia González del Tánago Ruiz, natural de Rudagüera. Juan Antonio y María
Rosa sólo tuvieron a su mencionado hijo Antonio. Murió[41]Juan Antonio de Argüeso en
el mismo lugar en que había nacido, Rudagüera, el 15 de abril de 1889.
Su hijo Antonio de Argüeso Ruiloba
(1839-1925) nació[42] en
Rudagüera, en el barrio de Lloredo, el 7 de julio de 1839, y murió[43] en el mismo lugar el 8 de
mayo de 1925. Casó[44] el 14
de febrero de 1863 con Teresa Gutiérrez de Santibáñez, natural de Rudagüera e
hija de Mateo Gutiérrez Pérez y de María Antonia Benita de Santibáñez Díaz, con
la que tuvo siete hijos: Prudencio[45]; Amado Cecilio[46]; María
Antonia[47]; Jaime
León[48];
Avelina Juliana[49];
Veneranda Candelaria[50]y
Fidel, que vivió y murió en Madrid[51].
Tenemos que
esperar a 1880 para que llegue a Torrelavega Eusebio Ballesteros Cerrada[52]
y se inicie con él una nueva saga de confiteros y pasteleros, de la que nos
ocuparemos más adelante.
Cereria y confitería Valentín García Corona. Colección Tomás Bustamante
[1] Bustamante Gómez, Tomás; Los comienzos dela Cámara de comercio e
Industria de Torrelavega. Artes Gráficas Quinzaños, 2012.
[2] Para más información ver: http://www.torrelavegantigua.com/2015/10/julian-ceballos-y-campuzano-1816-1876_10.html
[3] Matrículas
de la Contribución comercial e industrial de la villa de Torrelavega en 1835.
Archivo Municipal Torrelavega.
[4] Fue
bautizado en la Santa Iglesia Catedral el día 4 de enero de 1799.
[5] Libro
Bautismos Cartes (1771-1857), folio 69.
[6] Nacida
el 15 julio de 1825. Libro Bautismos Santander (1824-1826), folio 147 vto.
[7] Nacida
el 5 marzo de 1827. Libro Bautismos Santander (1826-1842), folio 74.
[8] Nacida
el 19 noviembre de 1832. Libro Bautismos Torrelavega (1775-1835), folio 45.
[9] Nacido
el 26 diciembre de 1834. Libro Bautismos Torrelavega (1775-1835), folio 71 vto.
[10] Casado
con Eloísa Lindes.
[11] Nacido
el 29 marzo 1837. Libro Bautismos Torrelavega (1835-1890), folio 97
[12] Nacida
el 3 agosto 1839. Casada con Manuel Marquina, de quien dejó por legitima hija a
Gumersinda Segunda, menor de edad. Libro Bautismos Torrelavega (1835-1890),
folio 115 vto.
[13] Nacido
el 5 noviembre 1841. Casado con Juliana García. Libro Bautismos Torrelavega
(1835-1890), folio 135.
[14] Nacido
el 30 abril 1846. Libro Bautismos Torrelavega (1835-1890), folio 182 vto.
[15] Ver su
defunción. No testó.
[16] Libro
Defunciones Torrelavega (1776-1898), folio 138 vto.
[17] Dejó
todas sus ropas de vestir a su hija política Juliana Serantes. Nombró albaceas,
contadores y partidores a Julián de Ceballos, Nemesio Fernández y Manuel
Marquina. Archivo Histórico Provincial Cantabria. Protocolos Notariales, Legajo
6.196, número 114.
[18] Coll y
Puig, Antonio María; Guía Consultor e Indicador de Santander y su Provincia,
1875, Santander, página 730.
[19] Bolado, Nieves y Ruiz de
Salazar, Julio; Maestros reposteros, Artes
Gráficas Quinzaños, 202.
[20] Ver
Padrones de Torrelavega, 1866, 1870 y 1876. Matriculas Industriales. Archivo
Municipal Torrelavega.
[21] Libro
Bautismos Campuzano (1751-1876), folio 234.
[22] Libro
Casados Zeanuri (1735-1793), folio 317 vto.
[23] Libro
Casados Zeanuri (1793-1827), folio 50 vto. y 51.
[24] Nacida 2 junio 1802.
[25] Nacido 20 mayo 1804.
[26] Nacida 18 octubre 1805.
[27] Nacido 2 noviembre 1807.
[28] Nacido 22 marzo 1810.
[29] Nacido 10 julio 1814.
[30] Nacida 21 julio1816.
[31] Nacida 4 octubre 1819.
[32] Nacido 11agosto 1821.
[33] Libro 8
Difuntos Torrelavega (1875-1898), folio 34.
[34] Libro
10 Difuntos Torrelavega (1890-1898), folio 102.
[35] Datos investigados por Amparo
Fernández-Regatillo Ruiz.
[36] Archivo Diocesano de Santander.
Libro de bautizados de Rudagüera. Sig. 4958, fol. 121 vto.
[37] Archivo Diocesano de Santander.
Libro de bautizados de Puente Arce. Sig. 369, fol. 96
[38] Archivo Diocesano de Burgos.
Libro 2º de bautizados de Arija, fol. 85 vto.
[39] Archivo Diocesano de Santander.
Libro de bautizados de Rudagüera. Sig. 4957, fol. 200 vto.
[40] Archivo Diocesano de Santander.
Libro de casados de Rudagüera. Sig. 4961, fol. 170 vto.
[42] Archivo Diocesano de Santander.
Libro de bautizados de Rudagüera. Sig. 4959, fol. 13 vto.
[43] Registro Civil de Alfoz de
Lloredo. Libro 42, fol. 3, sección 3ª
[44] Archivo Diocesano de Santander.
Libro de casados de Rudagüera. Sig. 7126, fol. 5
[45] Murió soltero a los 31 años.
[46] Murió
soltero a los 18 años.
[47] Vecina
de La Busta.
[48] Se casó
en Novales, donde murió. Tuvo descendencia en Novales y Oreña.
[49] Heredó
la panadería-confitería de Rudagüera. Al no tener hijos pasó a su sobrina Avelina González.
[50] Es la
madre de Avelina González.
[52] En varios escritos, libros y
periódicos se comete un error constante al afirmar que “La primera
pastelería planteada como un negocio fue la fundada a principios del siglo XIX
por Eusebio Ballesteros”. Esta persona llegó a Torrelavega en 1880.
Los procuradores son pilares fundamentales en el ámbito legal, actuando como intermediarios entre abogados y tribunales. Su labor asegura la correcta tramitación de los procesos judiciales, contribuyendo así a la eficiencia del sistema judicial.
ResponderEliminarExcelente artículo que visibiliza la labor fundamental en el gremio de las primeras confiterías de la villa de Torrelavega hasta el día de hoy.
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