En memoria de Tomás Bustamante Hurtado[1]
Durante
gran parte del primer tercio del siglo XX, Amancio Ruiz-Capillas del Castillo y
la calle de la Estrella mantuvieron una relación muy estrecha. A los dos años
de casarse, con 27 años, instala una zapatería que denominará Calzados Capillas. Era 1920 y el lugar
escogido esta importante zona comercial, al lado de la Plaza Mayor. Siete años
después, Tomás Bustamante Hurtado, con 7 años y huérfano de padre, entra a
trabajar de pinche en este comercio hasta su jubilación siendo gerente de la
empresa. Años después, en 1930, Amancio Ruiz-Capillas abre en la misma calle un nuevo negocio, en esta ocasión, una mercería.
La calle de
la Estrella es una de las primeras calles de Torrelavega que se cita en las
Actas Municipales. “Figura en el plano de 1852 y comunica la Plaza Mayor con la
Plazuela del Sol y la calle Consolación”[2]. Parece ser que esta
denominación se debe al hecho de que desde la Plazuela de la Estrella, donde
finalizaba la calle con el mismo nombre, se podía divisar la Estrella Polar por eso hoy en día aparece dibujada la rosa de los vientos en el suelo de ese lugar. Al lado florece otro
importante comercio, el de Gabino Teira. En 1921 por un acuerdo municipal,
correspondiente al día 1 de julio, el Consistorio Municipal cambia el nombre de
la calle por el de Martínez y Ramón, en honor al escritor, poeta y abogado
torrelaveguense José María Martínez y Ramón.
Nos tenemos que remontar hasta el siglo XVII para
encontrar, al norte de la provincia de Burgos, a los primeros Ruiz Capillas.
Serán los orígenes de este inquieto comerciante, cabal convecino, comprometido
con lo que él creía que era lo más justo y que por la irracionalidad de unos, su vida se ve truncada a muy temprana edad.
El apellido Ruiz-Capillas[3] se
distribuye, los últimos 400 años, por
todo el norte de la actual provincia de Burgos para, posteriormente,
extenderse por la antigua provincia de
Logroño hasta llegar a Torrelavega, a principios del siglo XX, con motivo de
una plaga agrícola.
A mediados de 1600 vivía en la aldea de Pomar,
perteneciente a la antigua provincia de
Burgos, Mateo Ruiz-Capillas. Este burgalés contrae matrimonio con María de la
Cruz Ruiz Trechuelo. De esta unión nacerá, el día 23 de diciembre de 1665, y en
esta misma aldea, Andrés Ruiz-Capillas que se casa en primeras nupcias con María López. Fallecida su primera mujer se esposará
en el pueblo de Quintana de la Cuesta con su segunda mujer, Catalina de Pereda,
el día 2 de mayo de 1695. Uno de sus
hijos, al que pondrán el mismo nombre que su padre, será bautizado en la
iglesia del lugar de Casares, siempre en la provincia de Burgos, donde nace, el día 25 de julio de 1707. Es el
tatarabuelo de Amancio Ruiz-Capillas del Castillo, nuestro comerciante.
Andrés Ruiz-Capillas Pereda se casa también dos
veces. Este hecho, como iremos viendo es
frecuente en esta familia. En primeras nupcias lo hará en el lugar de
Cebolleros con María Vélez de Angulo el día 18 de enero de 1738. Muerta esta y
en segundas nupcias se casará con Juana
San Martín, el día 17 de diciembre de 1760 en Extramiana, como los anteriores
lugares perteneciente a la provincia de Burgos.
De
esta unión nacerá[4]
el bisabuelo de nuestro biografiado,
José Ruiz-Capillas San Martín. Lo hace en Oña el día 2 de abril de 1761. Este
último lo complicará aún más, porque se casará nada menos que en tres ocasiones
siendo su tercera mujer Manuela Gómez de la Fuente con la que tendrá, en 1820 a
León Ruiz-Capillas de la Fuente, el abuelo paterno de nuestro comerciante. Además
José Ruiz-Capillas tuvo a Tiburcia[5],
José Benigno, Mercedes, Florentino y Manuela[6].
Siempre han sido los Ruiz-Capillas, con guion
o sin guion, muy prolíferos. El bisabuelo de Amancio, José Ruiz-Capillas San
Martín, tuvo seis hijos. Su abuelo León Ruiz-Capillas de la Fuente, nueve. Su
padre, Leopoldo Ruiz-Capillas González
tuvo doce hijos y por último Amancio Ruiz-Capillas Castillo cinco hijos.
León Ruiz-Capillas (n.1819), abuelo de nuestro
biografiado, se casará con Olalla González y tendrán por hijos a León, Román,
Juana, José Manuel, Saturnina, José, Miguel, Joaquina y Leopoldo que será el
padre de Amancio Ruiz-Capillas.
Firma autógrafa de León Ruiz-Capillas
León Ruiz-Capillas
Gómez, fue una persona afortunada, recibió buenas herencias. Juan Diez y
Mediavilla era por entonces cura beneficiado de la villa de Oña. A su muerte,
como así consta en su testamento, son sus sobrinos los que reciben la herencia que ascendía a la
cantidad de 84.000 reales de vellón. Los afortunados fueron los hermanos
Ruiz-Capillas: León, Florentino, Nicomedes, Manuela y Tiburcia. Para entonces
José ya había fallecido.
Su
hermano Florentino se había casado con Benita Rojas González[7]
(1814-1882) que era natural de Poza de la Sal. Al fallecimiento[8]
de Florentino Ruiz-Capillas en Oña el día 12 de abril de 1873, esta señora se casará, en segundas nupcias, con Santiago
Pérez y Pérez[9]
que era natural de Oña. El matrimonio no tuvo sucesión.
Esta
buena señora falleció en la villa de Oña el día 5 de marzo de 1882 y su segundo
esposo, Santiago Pérez y Pérez, lo hará nueve meses después, el 17 de diciembre
de 1882. Al no tener descendencia, como hemos dicho anteriormente, son los
hermanos de Florentino Ruiz-Capillas Gómez a los que les corresponde la hijuela.
Es decir a Nicomedes, Manuela, Tiburcia, José y León Ruiz-Capillas Gómez.
Doña Benita y su
segundo marido, unos meses antes de morir, fueron al notario del pueblo de
Frías, Víctor Ruiz-Capillas, para hacer el testamento[10]. El
reparto fue fácil y les correspondió a los Ruiz-Capillas vivos,
dejando una parte de sus pertenencias a personas de su entorno[11].
Pasado
año y medio, el día 17 de abril de 1883, los afortundos acuden al
despacho del notario[12]
de Oña, Placido Alonso Ojeda, para recibir la hijuela. Se personan León Ruiz
Capillas Gómez de sesenta años de edad, casado, propietario y vecino de
Oña; su hermana Tiburcia de 56 años
asistida por su esposo el farmacéutico de esta Villa, Tomás Ruiz Capillas y
Fernández Carranza[13];
y por último Elisa Sánchez Covisa y Ruiz Capillas, de 28 años de edad, soltera,
propietaria y vecina de este lugar. Elisa era hija de Manuela Ruiz Capillas y
Gómez que ya había fallecido[14].
Hay que señalar que León Ruiz Capillas Gómez compró la parte de la herencia que
le correspondió a su hermano Nicomedes, aumentando de esta manera la extensión
de sus viñas.
A
León Ruiz Capillas le correspondió aparte, de una cantidad en metálico, varias
fincas. Citaremos para hacernos una idea algunos ejemplos. Una viña en el término
de la Presa de 16 celemínes; otra viña en Indiavova de “cuatro obreros”; en la
Vega una heredad de 12 celemínes; en Valdeperros otra heredad de una fanega y
27 celemínes; en la Lobera una heredad de 5 celemínes; en Maza la mitad de una
era de trillar de seis celemínes; en la Industia una heredad de nueve celemínes
y en el rosal una viña de “10 obreros”.
Y por último, León Ruiz-Capillas y
su hermano Nicomedes[15]
recibieron la herencia de sus padres. Consiguieron las siguientes propiedades:
Heredad La Presa 16 celemínes
Viña Indiavova cabada
4 obreros
Heredad Vega 21
celemínes
Heredad Valdeperros 31 celemínes
Viña Hoyo 3 celemínes
Heredad
Lovera 5 celemínes
Heredad Heria 4 celemínes
Heredad Nava 4 celemínes
Heredad Billa 4
celemínes
Hera
Campo 3 celemínes
Finca Puente 3 celemínes
Heredad Barco 8 celemínes
Heredad Valdeperros 1 fanega
Además
obtuvieron una casa en Oña, en el número once, situada en la Plaza de la
Constitución[16]. Otra, situada en el número 8 de la Plaza del
Convento,[17] y una tercera que estaba ubicada en el número 17 de la calle del Pan también en
Oña[18].
Tantas propiedades que requerían una justa trasmisión. Hizo León Ruiz-Capillas
Gómez un primer testamento el 25 de
octubre de 1887. Cuatro años después, el 19 de noviembre de 1891, le desecha y con
Ramón de la Riva Fernández, notario de Burgos y vecino de Briviesca, redacta
uno nuevo en la villa de Oña[19].
Contaba por entonces con 71 años y ya se encontraba viudo. Su mujer Olalla González
había fallecido, lo mismo que sus padres José Ruiz-Capillas y Juana González.
Heredan
todos sus hijos, José, Miguel, Joaquín, Manuel, Juana, Saturnina y Leopoldo,
padre de nuestro biografiado, a partes iguales “saliendo algo favorecidas” sus
dos hijas por tener, en los últimos años, una mayor dedicación con su padre.
También quiso favorecer a su nieto favorito, León Pérez Ruiz-Capillas, “como
recuerdo y singular cariño”. Era hijo de su yerno José Pérez García a quien
nombra albacea junto a su hijo pequeño Leopoldo Ruiz-Capillas González.
Leopoldo
Ruiz-Capillas González (1854-1947), padre de nuestro biografiado, había nacido
en Oña. Además vivió en Villarcayo, en Burgos capital y en San Vicente de la
Sonsierra. Abandona esta villa, en los primeros años del siglo XX, para
instalarse en Torrelavega. Dejó San Vicente de la Sonsierra después de la
importante plaga de Filoxera[20] que asoló
las vides de aquellas tierras de la provincia de Logroño.
Leopoldo Ruiz-Capillas y su mujer Juliana del Castillo y familia. La foto está hecha en la casa que tenían los Sañudos en la calle Consolación que después vendieron a la Real Compañía Asturiana de Minas.
En la foto aparecen de izquierda a derecha y de arriba hacia abajo a los siguientes componentes: Francisco Rodríguez;
María Jesús Ruiz-Capillas, Leopoldo Ruiz-Capillas; Carmen Gutierrez y su marido
Amancio Ruiz-Capillas; Aurora Sañudo; Benjamín (Joselín) Ruiz-Capillas; Fernando
Sañudo; Luis Ruiz-Capillas y Inocencia de Román. Debajo de Carmen Gutierrez y
Amancio Ruiz-Capillas dos niñas Aurora y Margarita Sañudo Ruiz-Capillas. Entre
estas dos, José María Ruiz-Capillas Gutiérrez. En la fila de abajo: Luis
Ruiz-Capillas; Leopoldo Ruiz-Capillas; Carmen Bolado, su hija Sara; Juliana del
Castillo; Antonio Rodríguez y sentado delante de él Arturo Ruiz-Capillas
Gutiérrez; Leopoldo Ruiz-Capillas y entre sus piernas, Rosa Rodríguez; Sara
Ruiz-Capillas; Carmen Ruiz-Capillas (Curra) y Ángel Rodríguez.
En Villarcayo conoce
a la que más adelante será su mujer, Juliana del Castillo Orcajo. La novia y
madre de nuestro comerciante, nació en Burgos el día 16 de febrero de 1868 en
su domicilio familiar, en el número siete bajo de la Plazuela de San Juan. A
los tres días fue bautizada[21] por el
Abad de Burgos en la iglesia parroquial de San Lesmes[22] en la
capital burgalesa.
Era hija de Juan del Castillo del Barco, de profesión Caldedero y natural de Nuez de Abajo (Burgos) y de Nicolasa Orcajo Mariscal que nació en Vivar del Cid. Nieta por vía paterna de José del Castillo y Catalina del Barco naturales de Nuez de Abajo. Y por línea materna de Andrés Orcajo, natural de Burgos y de Dionisia Mariscal[23] nacida en Arcos.
Partida de bautismo de Juliana del Castillo Orcajo
Era hija de Juan del Castillo del Barco, de profesión Caldedero y natural de Nuez de Abajo (Burgos) y de Nicolasa Orcajo Mariscal que nació en Vivar del Cid. Nieta por vía paterna de José del Castillo y Catalina del Barco naturales de Nuez de Abajo. Y por línea materna de Andrés Orcajo, natural de Burgos y de Dionisia Mariscal[23] nacida en Arcos.
Tuvo el matrimonio
nada menos que 12 hijos de los que solo vivieron ocho. Cinco varones: Arturo[24],
Luis, Benjamín, Leopoldo y Amancio y
tres mujeres: María Jesús, Sara y Aurora.
Esta última, Aurora Ruiz-Capillas
del Castillo (1889-1976) se casará con Fernando Sañudo Solórzano[25]
(1883-1942) en la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, el día 9 de
septiembre de 1912.
Tuvieron tres hijos: Margarita, Aurora y Leopoldo. El novio era hijo de Juan Bautista Sañudo Abascal, con fábrica de calzados en la calle Argumosa, y de Margarita Solórzano García. Fernando comenzará a trabajar en la fábrica de zapatillas y almadreñas de su padre que estaba situada en la Llama. Fallecido su progenitor y, tras separarse de su hermano Santiago[26], montó su propia fábrica de zapatillas bajo la marca Efese. La factoría estaba situada en la calle Consolación que corresponde en la actualidad con los números 23 y 25. En 1953 Aurora Ruiz-Capillas que ya estaba viuda decreta la liquidación y el cierre de la empresa.
Posteriormente en este solar se construirá un edificio[27] de
viviendas que dura hasta nuestros días. Aurora Ruiz-Capillas pintó un emblemático cuadro de los antiguos campos del Malecón, donde juega la Real Sociedad Gimnástica de Torrelavega.
Aurora Ruiz-Capillas del Castillo
Tuvieron tres hijos: Margarita, Aurora y Leopoldo. El novio era hijo de Juan Bautista Sañudo Abascal, con fábrica de calzados en la calle Argumosa, y de Margarita Solórzano García. Fernando comenzará a trabajar en la fábrica de zapatillas y almadreñas de su padre que estaba situada en la Llama. Fallecido su progenitor y, tras separarse de su hermano Santiago[26], montó su propia fábrica de zapatillas bajo la marca Efese. La factoría estaba situada en la calle Consolación que corresponde en la actualidad con los números 23 y 25. En 1953 Aurora Ruiz-Capillas que ya estaba viuda decreta la liquidación y el cierre de la empresa.
Fernanado Sañudo Solórzano
Su otra hija, Sara Ruiz-Capillas del Castillo,
se casará con Jose María Cuevas. Vivieron en Mataporquera, provincia de
Santander, desde donde su marido suministraba carbón a Altos Hornos de Vizcaya. El matrimonio
no tuvo hijos hasta que adoptaron a una niña llamada Juana, conocida en la
familia como Kiki, que en la
actualidad vive en Alar del Rey.
Y por último, su tercera hija, María Jesús Ruiz-Capillas del Castillo que nace el 3 de agosto de 1903 en San Vicente de la Sonsierra, se casará con Francisco Rodriguez Solana,[28] que para entonces ya había vuelto de su experiencia Cubana. “Paco tirantes” con tan solo 10 años emigra a Cuba para trabajar en la fábrica de zapatos y zapatillas propiedad de un tío suyo. Tras años de incansable esfuerzo y con su dueño en avanzada edad, compra la fábrica. En 1919 decide venderlo todo y volver a España. Llega a Torrelavega y es aquí donde conoce a la que va a ser su mujer.
Se instala en la Plazuela del Sol después de comprar a su suegro, Leopoldo Ruiz-Capillas, parte de su negocio de licores y aguardientes. Existía en España un aguardiente muy conocido denominado “Anís del Mono”. En su anagrama aparecía un mono que cogía en una de sus manos una botella de anís. Francisco Rodríguez ideó una alternativa. Comercializó en su fábrica su propia marca: “Anís del Coco”. En este caso aparecía el mono con el fruto del cocotero. Tuvo el matrimonio cinco hijos: Luis, Ángel, Antonio, Rosa y María Jesús.
Sara Ruiz-Capillas del Castillo
Y por último, su tercera hija, María Jesús Ruiz-Capillas del Castillo que nace el 3 de agosto de 1903 en San Vicente de la Sonsierra, se casará con Francisco Rodriguez Solana,[28] que para entonces ya había vuelto de su experiencia Cubana. “Paco tirantes” con tan solo 10 años emigra a Cuba para trabajar en la fábrica de zapatos y zapatillas propiedad de un tío suyo. Tras años de incansable esfuerzo y con su dueño en avanzada edad, compra la fábrica. En 1919 decide venderlo todo y volver a España. Llega a Torrelavega y es aquí donde conoce a la que va a ser su mujer.
María Jesús Ruiz-Capillas del Castillo
Se instala en la Plazuela del Sol después de comprar a su suegro, Leopoldo Ruiz-Capillas, parte de su negocio de licores y aguardientes. Existía en España un aguardiente muy conocido denominado “Anís del Mono”. En su anagrama aparecía un mono que cogía en una de sus manos una botella de anís. Francisco Rodríguez ideó una alternativa. Comercializó en su fábrica su propia marca: “Anís del Coco”. En este caso aparecía el mono con el fruto del cocotero. Tuvo el matrimonio cinco hijos: Luis, Ángel, Antonio, Rosa y María Jesús.
Dos de los ocho hijos
de Leopoldo Ruiz-Capillas, Arturo y el propio Amancio, emigran a Argentina,
concretamente a Bahía Blanca. A Amancio no le debió gustar mucho aquello porque
en unos meses retornó a su origen. Su hermano se quedó en aquel país donde se
casó con una argentina, Rosa Espineira Díaz. Hizo fortuna con el cultivo de
cereales.
Además, como su padre, era un buen disecador al que le gustaba mucho la caza. Fue miembro de la Sociedad Ornitológica de Argentina y varios de sus trabajos fueron expuestos en Londres y Berlín. Falleció en aquel país, oficialmente de un accidente de caza.
Arturo Ruiz-Capillas del Castillo con su mujer en Buenos Aires
Además, como su padre, era un buen disecador al que le gustaba mucho la caza. Fue miembro de la Sociedad Ornitológica de Argentina y varios de sus trabajos fueron expuestos en Londres y Berlín. Falleció en aquel país, oficialmente de un accidente de caza.
Otro de sus hijos Luis Ruiz-Capillas del
Castillo se casará con una burgalesa, Inocencia de Román, que fallecerá a los
pocos años de contraer matrimonio.
El siguiente hijo, Leopoldo Ruiz-Capillas
del Castillo se casará con Carmen Bolado. Murió en Madrid defendiendo el
Cuartel de La Montaña en el mes de julio de 1936. Leopoldo nació en San Vicente de la Sonsierra el 31 de marzo de 1907. Fue jugador de la
Real Sociedad Gimnástica de Torrelavega. Tuvieron una hija llamada Sara. Y por
último Benjamín Ruiz-Capillas del Castillo, al que llamaban Joselín.
Luis Ruiz-Capillas del Castillo
Los que conocieron a
Leopoldo R. Capillas, que era así como rezaba en sus membretes, dicen de él que
fue un hombre emprendedor y eficiente. En sus comienzos vinatero, llegando a
reunir gran cantidad de viñas. Algunas las heredó, como hemos ido viendo, y
otras las compró. Embotelló vino con la
marca “Sierra Cantabria”, bodega que acabó vendiendo a unos vinateros
Vascos. Más adelante, instaló una importante fábrica de conservas vegetales en
San Vicente de la Sonsierra que se denominaba “Liga. La acreditada de Oña” donde se elaboraban conservas de tomate “al natural” muchas de las cuales iban
para la exportación.
Publicidad de la fábrica de conservas de Leopoldo Ruiz-Capillas del Castillo
También contó en San Vicente de la Sonsierra
con una importante destilería, actividad muy ligada a esta familia. Su tiempo
libre lo dedica a su gran afición, la caza del jabalí, que abundaba mucho por
aquellas zonas y también era un experto taxidermista.
A principios del
siglo XX y antes de trasladarse a vivir a Torrelavega, Leopoldo Ruiz-Capillas
González vivía, como ya hemos dicho, en San Vicente de la Sonsierra.
Anteriormente vivió durante el último decenio[29] del siglo
anterior, en Burgos y es allí donde nace su hijo Amancio. La hermana de
Leopoldo Ruiz-Capillas, Saturnina, tenía un comercio de géneros[30]
en Oña. Vivía en el número dos en la Plaza del Mercado en una casa[31]
con piso bajo, dos alturas y desván. Cuando Saturnina todavía era joven, con 33
años, soltera, sin hijos y en cama por
enfermedad, quiso “ordenar las cosas temporales”. Hizo testamento el día 9 de
febrero de 1894 ante el notario de Briviesca Ramón de la Riva. Dos meses
después, el día 10 de abril de 1894, fallecía en esta villa de Oña de donde era
natural.
Firma autógrafa de de Leopoldo Ruiz-Capillas
Nombró heredero a su
hermano Leopoldo aunque no se olvidó del resto de la familia. Pide a su hermano, que a su prima Andrea Elisa Sánchez Covisa “por los buenos servicios y por el
cariño que la profesa, le regale un vestido para que guarde luto. “De buen merino y hecho a gusto
de aquella, y si ella no le quiere de luto que se le haga a su gusto y de la
tela que ella quiera”. Y a su sobrina María Pérez 75 pesetas “por haberla
sacado de pilas”[32].
Pasados los años, el 6 de junio de 1905,
Leopoldo Ruiz Capillas González, acude a Oña en compañía del abogado y notario Marino Melchor y Arnaiz, con residencia en
Busto de Bureba del partido de Briviesca. Van a sustanciar el testamento[33]
que hizo su hermana Saturnina Ruiz
Capillas González.
De su padre, León
Ruiz Capillas, Saturnina habían heredado varias fincas y otras que adquirieron
después. Dejó a su hermano Leopoldo la
mitad de una tierra sita al pago de la Nava o Manzanal, de seis celemines de
sembradura; la mitad de una heredad de diez celemines de sembradura y “ocho
obreros de cavadura” situada al pago de la Presa; dos fincas en Valdeperros,
una de dos fanegas y media y otra de diez celemines, ambas de sembradura; una
era de trillar de dos celemines “al lado de Maza”; una viña en la Pineda de
“ocho obreros de cavadura”, con árboles frutales; una tierra en la Quebrantada
de una fanega; la vigésima parte de un Lagar de exprimir uva sito en un local
en la calle del Mercado, y una tierra al pago de Sotillos de un celemín.
En el verano
de 1901 Leopoldo Ruiz-Capillas González, industrial y vecino de San Vicente de
Sonsierra, compra la fábrica de Aguardientes[34]. Se la compra a su
consuegro Juan del Castillo Barco,
industrial y vecino de Logroño. Bien debió negociar Leopoldo Ruiz-Capillas la
compra, porque la adquirió por solo 3.000 pesetas. Un año antes se la había
comprado Juan del Castillo a Leopoldo Lewin Auser que contaba con despacho en
San Sebastián. La tasación realizada por este despacho ascendía a 11.034
pesetas.
Fábrica de conservas en ruinas en San Vicente de la Sonsierra
La
fábrica estaba situada en la calle Mayor de este pueblo que contaba con poco
más de 2.600 habitantes, y distaba aproximadamente 38 kilómetros de la capital.
“Ocupaba una superficie de 18 áreas y 19 centiáreas. Además disponía de una
caldera bitubular o generador de vapor de 1 metro y 20 centímetros de diámetro, y un recipiente cilíndrico de plástico para calefacción de un metro de
diámetro por dos de largo. Contaba con un refrigerante, montado sobre un cono
de madera de pino[35],
compuesto por una caldera de hierro[36]. Más de 80 metros de tubería
de hierro, caños de hierro, llaves de paso y 7 tinajas de madera de pino del
Norte de América con siete caños cada una y una capacidad de 11 litros”. Pocos
años después Leopoldo Ruiz-Capillas González, antes de irse a vivir
definitivamente a Torrelavega, vende su fábrica de aguardientes[37]. La
transacción se realiza el 14 de mayo de 1908 en Haro y el comprador un vecino
suyo, Modesto Bengoa Pérez[38].
Ya
hemos visto que la relación de esta familia con los aguardientes no
corresponderá exclusivamente a esta rama familiar. La línea materna de nuestro
biografiado también tuvo otra fábrica de estas características. Me estoy
refiriendo a Bonifacio del Castillo Orcajo, con fábrica de aguardientes en
Cenicero, población situada a 20 km de Logroño y que contaba en aquellos años
con aproximadamente 2.500 habitantes. Estaba situada a las afueras del pueblo
en el paraje conocido como Ribera del Ebro. Curiosamente, a su lado había otra
fábrica de aguardientes, la de Manuel del Campo Salazar.
A Bonifacio del Castillo se la había
vendido su padre Juan del Castillo Barco que vivía en Burgos, por 6.500 pesetas.
El patriarca había adquirido esta fábrica de aguardiente, con una extensión de 1.320 pies, a los hermanos
Melchor y Prudencio Sáez por 4.500 pesetas[39].
Antes
de marchar de San Vicente de la Sonsierra a vivir a Torrelavega, Leopoldo Ruiz-Capillas decide vender. La tasación de la
fábrica de aguardientes de San Vicente se realiza en 1901, y es el despacho de
San Sebastián de Leopoldo Lewin el que hace la venta. Los edificios ocupaban
una superficie de 18 áreas y 19 centiáreas y fueron valorados en 7.719 pesetas.
Además, cuantificó una caldera bitubular o generador de vapor de 1 metro y 20
centímetros de diámetro y un recipiente cilindrico de plástico para calefacción
de un metro de diámetro por dos de largo. Un refrigerante, montado sobre un
cono de madera de pino de un metro treinta centímetro de diámetro por uno
sesenta de alto, compuesto por una caldera de hierro de un diámetro de un metro
y veinte centímetro de diámetro con un serpentín de cobre de 2 y media vueltas
de 10 centímetros de diámetro y otros doce de cuatro centímetros. 80 metros de
tubería de hierro, caños de hierro, llaves de paso, etc. 7 tinajas de madera de
pino del Norteamérica con siete caños cada una y una capacidad de 11 litros.
Otra tina de madera de pino del Norte de América con 11 caños. Y otra cuba de
madera del mismo material empotrada en el suelo. Todo arrojaba un valor que
ascendía a 11.034 pesetas.
La
plaga de las vides, que afectó a toda España, fue el motivo por el cual
abandonaron San Vicente de Sonsierra. La Filoxera entró en la provincia de
Logroño con el cambio del siglo XIX al XX, y pese a todos los esfuerzos, este
insecto parecido a un pulgón, acabó con todas las vides. Una vez destruidas no
quedaba más remedio que esperar dos años para una nueva plantación y alguno más
para recoger una buena cosecha. Esta circunstancia hizo qué Leopoldo
Ruiz-Capillas González llegue[40] a Torrelavega, donde ya vivía parte de su
familia, junto a su mujer y sus ocho hijos sobre 1907. Se instalan en el
Boulevard Demetrio Herrero, en la esquina con la calle Julián Ceballos[41]. Era un
amplio local donde se vendían vinos, licores y aguardientes a granel. Muchas de
estas existencias las había traído
cuando cerró la empresa de San Vicente de la Sonsierra. Tenía una marca
registrada que comercializaba bajo la denominación de “Anís del corzo”.
Membrete de la fábrica de Aguardientes y licores de Torrelavega
Como ya hemos citado, el interés por el negocio de
destilerías era muy común en esta familia. Su suegro, Juan del Castillo del
Barco[42],
tenía también otra fábrica de aguardientes en Aldeberria y otras muchas cosas
más. Alcanzaba la fábrica una superficie “de 1.600 metros cuadrados y de un
solo piso,” en la jurisdicción de Alcanadre, perteneciente a la antigua provincia de Logroño. Era el propietario, junto a su socio Francisco del Camo Lacor[43]. La
habían comprado a partes iguales a Manuela Vallejo Moreno[44] en 1892.
A la izquierda de la fábrica Juan del Castillo y del Barco tenía una bodega para “colocar las prensas y
las cubas”. Estaba situada en la parte norte del pueblo, y se la compró a
Domingo Rojo que era el dueño de la “Bodega Rojo” que era así como se llamaba.
Juan del Castillo Barco (1834-1917)
nació[45] en
1834 en el pueblo de Nuez de Abajo en la provincia de Burgos. El apellido del
Castillo está ligado al oficio de Calderero. Además, Juan del Castillo Barco,
suegro de nuestro biografiado, era propietario de una fábrica de aguardientes,
concretamente en la jurisdicción de
Alcamadre y también de una bodega[46]. Tuvo tres hijos Juan del Castillo: Bonifacio, Antonio y
Juliana, Esta última será la madre de nuestro biografiado, Amancio Ruiz-Capillas. Bonifacio
del Castillo Orcajo fue alcalde de Torrelavega de 1924 a 1926. Nació[47]
a las 11 y media de la mañana del 30 de agosto de 1872 en la capital de Burgos
un niño al que pusieron los nombres de Bonifacio, Pedro y Félix. A los pocos
días fue bautizado[48].
Sus padres Juan del Castillo del Barco que era calderero de profesión, había
nacido en Nuez de Abajo de la provincia de Burgos, y Nicolasa Orcajo Mariscal
que lo había hecho en Vivar del Cid.
Vivían sus padres en el número 7 de la Plaza de San Juan en Burgos. Al día
siguiente de su nacimiento, a las 11.30 de la mañana, es registrado su
nacimiento ante el Juez municipal del
Juzgado[49]
de Burgos Nicolás Iglesias.
Se
casó Bonifacio con Concepción Sañudo Solórzano (1886-1978). Ella era la hija
pequeña de Juan Sañudo Abascal y Margarita Solórzano García, propietarios
de una fábrica de zapatillas en la calle Argumosa de Torrelavega. Además de
Concepción este matrimonio tuvo a Santiago[50] y
Fernando[51].
Los dos relacionados directamente con la fabricación de zapatillas y alpargatas
en nuestra ciudad. El último hijo de Juan del Castillo, Antonio del Castillo
Orcajo[52]
(n. 1873), emigró a Buenos Aires, Argentina, donde se quedó a vivir.
Falleció[53] Juan del
Castillo en Logroño el día 18 de agosto de 1917 a los 83 años de edad. Ocho
años antes, en 1909, hizo su testamento[54] cuando vivía en el pueblo de Cenicero,
provincia de Logroño. Tenía muchas posesiones,[55] tanto en la provincia de
Burgos como en la de Logroño. Fincas en
Las Celadas que fueron adjudicadas a su hija Juliana; la fábrica de aguardientes
en Cenicero y varias fincas en Nuez de Abajo que le correspondieron a su hijo
Bonifacio; y por último, la bodega y la fábrica de aguardientes en Alcamadre
fueron para su tercer hijo Antonio. Además, poseía inmuebles en Nuez de Abajo,
en las Celadas y en Zumel que fueron valoradas. Dejó escrito en su testamento[56] que
“mejoraba en un tercio de sus bienes a su hijo Bonifacio”, aunque este renunció
al hacer las particiones.
Cuando muere Juan del Castillo, todas las propiedades
las heredaran su viuda Nicolasa Orcajo Mariscal, que por entonces ya tenía 77
años, y sus tres hijos, Bonifacio, Antonio y Juliana, madre de nuestro
biografiado. Heredan la fábrica y la bodega anteriormente descrita y muchas cosas más. Sobre todo viñas que se
extendían por otros pueblos de la
provincia de Logroño: Celadas,
Zumiel y Nuez de Abajo principalmente. En este último pueblo era
propietario de la mitad de una casa situada en el número 4 de la Plaza Mayor, y
en Zumiel de una participación en un Molino veraniego. Para hacernos una idea doy a conocer alguna de estas propiedades.
Termino Lugar Medida
Nuez de Abajo Arriandero 7
celemínes
Nuez de Abajo Cruz Cornales 5 celemínes
Nuez de Abajo Pedregón 8 celemínes
Nuez de Abajo
Caravas 5
celemínes
Nuez de Abajo
Ciudad vieja 5 celemines
Nuez de Abajo Arroyo Capellanía 8
celemínes
Nuez de abajo Bario Bajero ½ una trilla
Nuez de Abajo Entreloscios ¾
14 celemines
Nuez de Abajo Hospitalería ½ fanega
Nuez de Abajo Vega[57] 6
celemínes
Celadas Pozo Blanco 11 celemínes
Celadas Cabrada 8
celemínes
Celadas Calleja de
Tobares 4
celemínes
Celadas Cinchullo 4 celemínes
Celadas Nogarcia 5
celemines
Celadas Quintana 9
celemínes
Celadas Tobares 1
celemín
Celadas Arenal 4
celemínes
Celadas Ojal 6 celemínes
Celadas Matagrande 5 celemines
Celadas Sotorocin 1
fanega y 2 celemínes
Celadas Barrios 6 ½ celemínes
Celadas Hoya 1 fanega y ½ celemín
Celadas Menudiez 1 fanega y 1 celemín
Celadas Campillo 12 ½ celemín
Celadas Boganes 24 celemínes
Celadas Serna 2 fanega y 11 celemínes
Celadas Orguilla 19 celemínes
Celadas Pozo Blanco 4 ½ celemínes
Celadas Traillano 6 celemínes
Celadas Marcos 6
celemínes
Celadas Vargas 5
celemínes
Celadas Fresnillo 8 celemines
Celadas Cruz de la Fuente 16 ½ celemínes
Celadas Retortilla 5 celemínes
Celadas Aguachales 5 celemínes
Celadas Velarde 16 celemínes
Celadas Fresnillo 6 celemínes
Zumiel Río Uzbel Molino Harinero[58]
Zumiel Picón de la Repostera 12 ½ celemínes
Zumiel Carrila 3 fanegas y 11 celemínes
Zumiel Valdementero 1 fanega y 4 celemínes
Zumiel Zarzal 3 ½ celemínes
Zumiel Pinilla 11 celemínes
Zumiel Arroyo 22 celemines
Zumiel Carreballonosa 3 fanegas y 11 celemínes
Zumiel Roma 12 celemínes
Zumiel Hagares 11 celemínes
Zumiel Alberguera 16 celemínes
Su
mujer Nicolasa Orcajo Mariscal (1811-1920) fallece en Torrelavega,
el día 25 de mayo de 1920, a los 79 años de edad. Pocos días antes, el día 13
del mismo mes y año, hizo su testamento ante el notario de Torrelavega José
María del Hoyo y Gutiérrez del Olmo[59]. Son los tres hijos los
que heredan todos los bienes del matrimonio “por iguales partes”. Es Gerónimo
del Castillo Vecino el que hace de cortador/partidor de todos los bienes de
Nicolasa Orcajo.
Tomás Ruiz-Capillas Carranza. Boticario de Burgos y después de Oña. En 1853 instala una botica dentro del Monasterio Benedictino de Oña hasta la llegada de los Jesuitas en 1880.
Con 77 años Leopoldo Ruiz-Capillas González decide
vender a “su hijo político” Fernando Sañudo Solórzano[60], casado con Aurora
Ruiz-Capillas del Castillo, el negocio que tenía en el número 8 del Boulevard
de Torrelavega[61]. Para
ello el 14 de mayo de 1931 deciden realizar el Inventario del “Negocio de
Aguardientes y Gaseosas”. Esta denominación es la que aparece en los membretes
de su empresa que ofrecía un activo de 69.046 pesetas y un pasivo de 92.520.
Las
existencias en el establecimiento eran importantes. Para darnos una idea con lo
que se trabajaba en este tipo de fábricas destacamos: un bocoy padre, doce bocoyes,
doscientos garrafones, cinco barriles nuevos, veinte barriles usados, un bocoy
de moscatel, una bomba de trasegar y una camioneta Chevrolet. Además: 600 de
alcohol de 96º, 430 litros de anisado, mil novecientos treinta de castilla de
90º, mil novecientos cincuenta litros de castilla de 45º, cuatrocientos de caña
de 40º, cuarenta y ocho litros de coñac de 40º, noventa y seis de ron, treinta
litros de anís, trescientos litros de alcohol desnaturalizado, noventa y seis
de cazalla, ochenta litros de licores, ciento veinte de ginebra, moscatel, vino
blanco, vinagre, vermut y treinta y dos litros de vino quinado. La venta la
sellan mediante una escritura[62] de compraventa que realizan en Villarcayo
(Burgos) en la notaría de Eustaquio Laso y Bañares, el día 22 de enero de 1932.
Cuando contaba 86 años,
estando ya viudo, fallece[63] el
día 10 de agosto de 1947 Leopoldo Ruiz-Capillas González, padre de Amancio
Ruiz-Capillas, en la Plazuela del Sol de Torrelavega, en casa de su hija María
Jesús. Al día siguiente fue enterrado en el cementerio de Geloria a donde
acuden sus hijos, Aurora,
María Jesús, Sara y Benjamín
Amancio Ruiz-Capillas con cuarenta años
Su hijo Amancio Ruiz-Capillas del
Castillo nace en Burgos el día 21 de diciembre de 1893. Pronto se traslada a vivir con sus padres y
sus hermanos a la casa que tenían en la Plaza Mayor de San Vicente de la
Sonsierra, en la antigua provincia de Logroño. En los primeros años del siglo
XX llega[64] con su
familia a Torrelavega donde se instalan
definitivamente. Es aquí donde estudia el bachillerato que compaginó con estudios
de contabilidad que le valdrán, más adelante, para la gestión de sus negocios.
En el número
10 de la calle de la Estrella instala una zapatería, Calzados Capillas y posteriormente en esta misma calle una mercería[65]. Fue
fundador del Tiro Nacional y
colaborador de la revista Armas y
Deportes. Llegó a ser en los años veinte Redactor Corresponsal de esta
revista madrileña. Notable tirador ganó varios trofeos de tiro patrocinados por
la Diputación de Santander. Políticamente perteneció al sector de la falange que
encabezaba su amigo Manuel Hedilla con línea directa con el político falangista
José Antonio Primo de Rivera. Comprometido socialmente fue fundador y profesor
de una pequeña escuela nocturna para hijos de obreros.
Los que le conocieron le definen como una persona simpática,
inteligente y comprometida con los más desfavorecidos. Junto a su amigo y
vecino Luis Merino Padilla,[66], que
tenía su comercio de telas y tejidos frente a la Zapatería Capillas, creó una pequeña escuela donde acudía nada más
cerrar “la tienda”. Así era como se denominaba a la zapatería que regentaba en
la calle de la Estrella, y en la que en su trastienda en estanterías se
almacenaban los libros que empleaba en la formación de aquellos niños.
Carnet de corresponsal de la revista Armas y Deportes
Amancio, con calle propia en la ciudad, conoce a la que va
ser su mujer Carmen Gutiérrez Alonso con la que se casa en la iglesia de
Nuestra Señora de la Asunción de Torrelavega. La ceremonia religiosa oficiada
por el cura presbítero[67]
Filiberto de la Encina se celebra el día 22 de abril de 1918, por entonces
contaba Amancio con 25 años. El matrimonio tuvo cinco hijos, José María[68],
Arturo[69],
Luis[70]
y dos hijas más que permanecieron solteras, Carmen y Pilar.
La novia era hija de Manuel Gutiérrez Fernández,
un pasiego con un olfato especial para los negocios. Persona muy religiosa, hasta tal punto que cuando estuvo enfermo
mandó construir frente a la
cama un altar, donde todos los día un
cura de la parroquia de Torrelavega le decía misa. Su hijo mayor, Jose
Gutiérrez Alonso, fue un
industrial con fábrica de zapatillas en Torrelavega. El suegro de Amancio era también
ganadero, ligado a la cooperativa SAM. Fue teniente
de alcalde del Ayuntamiento, cofundador del Círculo Católico y Carlista destacado.
Aunque en el Libro de Difuntos[71] de Torrelavega dice que “Amancio
Ruiz-Capillas Castillo con 42 años fue sepultado en el cementerio de Geloria el
día 8 de agosto de 1936, y “había fallecido por disparos de arma de fuego en la
noche de los presentes”, es evidente que no es del todo cierto. Los hechos
ocurrieron así:
Desde
un primer momento José Antonio Primo de Rivera quiso que el jefe de la
falange de Renedo, Manuel Hedilla Larrey,[72] y el de Torrelavega,
Amancio Ruiz-Capillas, hicieran todo lo
posible para que la provincia de Santander se pasara al bando de los sublevados.
Era muy intensa la amistad entre estas dos personas. La contraseña escogida
para esa operación, y guardada con celo, fue Covadonga. No consiguieron su propósito. Un capitán de
la Guardia Civil les traicionó. Amancio tuvo que esconderse en la fábrica de zapatillas
de su cuñado José Gutiérrez, que se encontraba en la calle Joaquín Hoyos debajo
de donde él mismo vivía. La situación se hizo tan insostenible que no les quedó
más remedio que huir de Torrelavega. Junto a un amigo suyo, Pelayo Marcos,
pretendieron llegar al Escudo donde se encontraban las tropas sublevadas.
Salieron de noche vestidos con la típica blusa que llevaban los ganaderos.
Se desplazaban en la oscuridad y por el día permanecían escondidos en parajes boscosos. Una brújula y un paquete de ideales les acompañaron en su huida. Una noche de mucha niebla se perdieron y llegaron equivocadamente a San Pedro del Romeral donde fueron detenidos, identificados y llevados al cuartel de Alceda. Salieron en dos coches rumbo a Torrelavega y desde allí se dirigieron Suances. En la zona de los locos, concretamente en la Roca Blanca, en la Punta del Dichoso, fueron fusilados[73].
Pertenencias personales en el momento de fusilamiento
Se desplazaban en la oscuridad y por el día permanecían escondidos en parajes boscosos. Una brújula y un paquete de ideales les acompañaron en su huida. Una noche de mucha niebla se perdieron y llegaron equivocadamente a San Pedro del Romeral donde fueron detenidos, identificados y llevados al cuartel de Alceda. Salieron en dos coches rumbo a Torrelavega y desde allí se dirigieron Suances. En la zona de los locos, concretamente en la Roca Blanca, en la Punta del Dichoso, fueron fusilados[73].
Fue enterrado en este mismo lugar,
allí permanecieron sus restos mucho tiempo. Solo le acompaño una cruz de piedra
donde se podía leer: Amancio Ruiz
Capillas. Caído en este lugar por Dios y por España, 8.8.36. Presente. Esta
cruz y sus restos permanecieron hasta la urbanización de la zona. Fueron
recuperados sus restos y llevados a la cripta de la iglesia de la Virgen Grande
de Torrelavega, donde reposan. La cruz fue depositada en el cementerio de
Geloria junto a otras tumbas de la familia. La guerra
incivil trajo estas barbaridades en uno y otro bando. ¡Ojala no vuelva a
ocurrir!
IMÁGENES PARA EL RECUERDO
Cripta de la iglesia de la Virgen Grande
IMÁGENES PARA EL RECUERDO
Familia materna de los Ruiz-Capillas
Leopoldo Ruiz-Capillas
Aurora Ruiz-Capillas
Antonio del Castillo y su hija Emilia
Aurora Ruiz-Capillas del Castillo y Fernando Sañudo Solorzano
Cruz de la tumba de Amancio Ruiz-Capillas del Castillo
Carta de Antonio Ruiz-Capillas farmacéutico de Oña
[2] Izaguirre, José; 22 calles de Torrelavega. Ayuntamiento
de Torrelavega.
[3] Al principio este apellido
Ruiz-Capillas lo formaban dos, Ruiz y Capillas. Más adelante se unirá en uno
solo. Con objeto de una mayor simplificación nosotros desde el principio usaremos
el apellido actual.
[4] Días después fue bautizado en
Nofuentes.
[5] Permaneció soltera.
[6] Casada con José Colina,
propietario y vecino de Oña.
[7] Era hija de Santiago Rojas e
Ildefonsa González.
[8] Archivo Notarial. Notario Ramón
y Cia., 28 agosto 1873. Florentino
Ruiz-Capillas un año antes de su defunción hizo, el 19 de diciembre de 1872,
testamento en Oña ante el notario José Traber y Franch.
[11] “A
Catalina Vesga mujer del Guardia Civil Juan López Rico todas las ropas de uso
interior de su cuerpo, como son vestidos, pañuelos, manteles, sayas, camisas y
calzados y de todo ello otorgarán a Victoria Vesga una mantilla, dos sayas y
cuatro camisas que fueran de su voluntad. A manuela Alonso una saya negra, a
Teresa Pereda los vestidos usados hasta el fallecimiento”.
[12] Placido Alonso Ojeda notario de
la villa de Oña, 17 abril 1883.
[13] De 54 años de edad y con botica
en la villa de Oña.
[15] Nicomedes Ruiz Capillas y Gómez,
mayor de edad, casado comandante del Regimiento de Infantería de Sevilla número
33 en operaciones en esta provincia de Navarra.
[19] Archivo familiar. Protocolo
Notarial número 10. Testamento de León Ruiz-Capillas.
[20] Insecto parecido al pulgón, pero
más pequeño y de color amarillento, que ataca las hojas y los filamentos de las
raíces de la vid; se multiplica con rapidez y forma plagas que pueden destruir
en muy poco tiempo grandes zonas de viñedos; es originario de América del
Norte.
[21] Fueron sus padrinos Gregorio del Castillo, tío de la
niña, soltero, estudiante de Teología y natural de Nuez de Abajo y Tecla
Angulo, soltera y natural de Mansilla de Burgos.
[22] Tomo 16 Bautizados Parroquia de
San Lesmes, 268 vto.
[23] Registro Civil Burgos. Tomo 100,
folio 89.
[24] Nacido 12 enero 1888 en Burgos.
[25] Nació en Torrelavega, el día 29
de mayo de 1883. Para más información ver el blog
http://www.torrelavegantigua.com/2012/08/fernando-sanudo-solorzano-1883.html
[26] Para más información ver
http://www.torrelavegantigua.com/2012/04/santiago-sanudo-solorzano.html
[27] En el número 24 estuvo instalada
en el primer piso la Biblioteca Municipal. En el segundo piso derecha vivía el
médico Federico Peraita, en la izquierda un hijo de Aurora, Leopoldo Sañudo
Ruiz-Capillas. Y en tercero derecha, mi padre Tomás Bustamante Hurtado y en el
izquierdo, otra hija de Aurora, Margarita casada con el vinatero Luis
Compostizo.
[28] Era natural de Castañeda.
Falleció el 26 de enero de 1973.
[30] Que
procedían de Don Eladio Escudero, Don Rufino Marín, Viuda de Alamo, Juan Zamora
y los Señores hermanos de Martinez.
[31] Valorada en 3.500 pesetas.
[32]
Fue madrina de bautismo.
[34] Archivo familiar. Eduardo Casuso, notario de Logroño.
Compraventa número 212 de 18 de julio de 1901.
[35] De un metro treinta centímetro
de diámetro por uno sesenta de alto
[36] De un diámetro de un metro y veinte
centímetro con un serpentín de cobre de 2 y media vueltas de 10 centímetros de
diámetro y otros doce de cuatro centímetros.
[37] Archivo familiar. Compra-venta. Escritura número 128,
tomo 44, rollo120. Ignacio Ansuátegui y Arteta, abogado y notario con residencia
en Haro.
[38] También vivía en la calle Mayor
de San Vicente de Sonsierra.
[39]
Certificación finca de
Bonifacio del Castillo Orcajo. Registro de la propiedad de Logroño. 20 julio
1920. Registrador de la propiedad de Logroño José Mena y García, doctor en
Derecho, licenciado en Filosofía y Letras, ex notario electo de Sevilla y
abogado en ejercicio en Utrera y Burgos.
[40] Aparece
por primera vez en las “Matriculas de la Industria y del Comercio” en 1910 en
el Archivo Municipal de Torrelavega. Por eso pienso que llegará unos años
antes.
[41] Calle dedicada en honor del
militar y alcalde de Torrelavega Julián Ceballos y Campuzano. Ver
http://www.torrelavegantigua.com/2015/10/julian-ceballos-y-campuzano-1816-1876_10.html.
[44] Según
costa en escritura otorgada en Calahorra, tomo 9º del ayuntamiento de
Alconadre, folio 244, finca nº 977.
[45] Según
tu testamento.
[46] Escritura de adjudicación de bienes.
Notario Eustoqui Laso Bañares, abogado y notario de Villarcayo. 1 marzo 1921.
Los bienes inventariados 5.0625 pesetas
[47]
Fue registrado en el Civil de Burgos el 31 agosto 1872. Fueron testigos,
Emiliano de Quevedo y Val natural de Villahoz y Isidoro Santa María y Sáez
natural de Burgos capital y curtidor de guantes. Registro Civil de Burgos. Tomo
3 provincial, folio 141 y número 1411.
[48] Siendo
testigos Emiliano de Quevedo y Val que era natural de Villahoz y el curtidor
Isidoro Santa María y Sáez nacido en la capital de Burgos donde tenía una
fábrica de guantes.
[49] Juzgado
Municipal de Burgos, Numero 1411.
[50] Ver
http://www.torrelavegantigua.com/2012/04/santiago-sanudo-solorzano.html
[51] Ver
http://www.torrelavegantigua.com/2012/08/fernando-sanudo-solorzano-1883.html
[52] Nació a
las 5 de la mañana del día 13. A los dos días fue bautizado. Registro Civil
Burgos, tomo100, folio 89.
[54] Notario de Cenicero Nicolás
Rodríguez, protocolo notarial de 18 mayo 1909.
[55] Nombró Albacea a Apolinar Orcajo
Mariscal, natural de Rabe de las Calzadas (Burgos). Y partidores de la herencia
a este último y a José del Castillo Moral vecino de Espejo (Burgos).
[56]
Testamento de Juan del Castillo Barco. Hijuela de su hija Juana del Castillo
Orcajo. Notario de Torrelavega Teodoro Velez. Protocolo Notarial 143 del 22 de
julio de 1918.
[59] Para más
información sobre este notario ver Bustamante Gómez, Tomás; El Banco de Torrelavega 1920/1942, Artes
Gráficas Quinzaños, 2009, Torrelavega.
[60] Hermano de Santiago Sañudo
Solórzano fundador del Banco de Torrelavega (1920-1942). Para más
información Bustamante Gómez, Tomás; El Banco de Torrelavega 1920/1942.
Imprenta Artes Gráficas Quinzaños, 2009.
[61]
Esquina a la calle Julián Ceballos.
[62]
Fueron testigos: el dependiente Antoliano Saiz García y el industrial Anastasio
Gallo Rámila vecinos de Villarcayo.
[63] Dejó cuatro hijos, Aurora, María
Jesús, Sara y Benjamín. Libro 16 Difuntos Torrelavega (1938-1950) , folio 154.
[65] Ver
Matriculas Industriales del comercio de Torrelavega, 1835/1950. Archivo
Municipal Torrelavega.
[68] Casado con Josefina Díaz García.
[69] Casado con Rosario Tapia.
[70] Casado con María Dolores
Pérez-Viñeta Bernáldez.
[72] Nacido
en Ambrosero en 1903. En 1937 fue detenido por el Régimen del general Franco y
condenado a dos penas de muerte, que le fueron condonadas, por no apoyar al
general sublevado.
[73] Testimonio
visto y contado por una pescadora de Suances que fue ama de cría del hijo mayor
de Amancio.
Un miembro de mi familia, Blanca Sáiz y Sáiz, era descendiente de don Ricardo Sáiz y su esposa Estefanía Sáiz, que eran aún propietarios, en 1922, de un Bar/Cantina situado en la misma calle, al número 12 y de una tienda de ultramarinos en Santillana del Mar. Blanca se trasladó a Pinar del Río, Cuba y entró a formar parte de mi familia aunque no tenía lazos de sangre con esta. Le ruego perdone si le tomo el tiempo, pero por favor oriénteme acerca de como aprender de la historia de la Calle de la Estrella. Resido en los EE. UU. adónde vine procedente de Cuba. Me gustaría investigar la biografía de Blanca, que era nacida en Torrelavega y triunfó como comerciante en Pinar del Río. Realmente no sé adónde dirigirme. He escrito al Ayuntamiento de Torrelavega y nadie me ha respondido. Mi gratitud anticipada.
ResponderEliminarBuenas tardes. Leo ahora este correo suyo. Disculpas. Cuénteme esa historia a mi correo
Eliminarbustamantegomeztomas@gmail.com
Muchas gracias.
Pues yo soy Maria Elena Ruiz-Capillas Domínguez, hija De José Maria Luis Arturo Ruiz-Capillas Rodríguez, y nieta de Benjamin Ruiz-Capillas del Castillo que fue desheredados por casarse con mi abuela Cándida Rodríguez Sáez, por amor y aunque no haya heredado nada de la fortuna familiar tengo el mimo derecho de aparecer en la historia de mi familia yo y todos los demás hijos y nietos de Ruiz-Capillas del Castillo
ResponderEliminarHE DICHO
Con mucho gusto. Coméntemelo en bustamantegomeztomas@gmail.com
EliminarMuchas gracias.
Gracias por toda la investigación, pero algo me resulta extraño, llevar a alguien hasta casi el borde del acantilado y no arrojarlo al mar me parece algo poco lógico, hay sitios mas cercanos a Torrelavega donde dar el paseo pero supongo que si los restos están enterrados en el cementerio es que no fue arrojado. ¿Puedes confirmar que en verdad los restos fueron recuperados o solo se trajo la cruz conmemorativa?.
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