Las
inspecciones que se realizaban en aquellos años sobre las instalaciones públicas
no eran demasiado frecuentes. Contaba el concejo de Torrelavega, en 1749, con un “Hospital,
con una Real Cárcel y con una taberna y un matadero-carnicería”. El secretario
de la Duquesa del Infantado, Gaspar de Ceballos Barreda, era el que solicitaba las inspecciones. El inspector
Manuel Valentín Campuzano. Ambos pertenecientes
a linajes de la jurisdicción de Torrelavega. En ese año el inspector visitó la
taberna y la carnicería. Para esta última concluyo: escaso aseo y limpieza en el sitio donde se matan y se pesan carnes,
por haver como havía muchos Huessos, sangre en el suelo y Broza. Por lo
tanto estos establecimientos públicos no estaban en las mejores condiciones
para abastecer a los habitantes de aquel lugar. Noventa años después confeccionan
un plano de “Planta y alzado del matadero, bodega y carnicería vieja de la
villa de Torrelavega. El alzado que se presenta es suficiente para formar
juicio del estado actual del Matadero, carnicería y Bodega” …. El plano, en
acuarela en colores y tinta, pertenece al pleito entre Manuel de la Revilla y
el concejo de Torrelavega, por la anulación de la venta de unos terrenos. Real Audiencia
y Chancillería de Valladolid.